domingo, 10 de mayo de 2020

Despojo




El/mi camino fatigado es,
siglos y siglos, lunas tras lunas,
ahuecando el polvo
ancestral
de los abuelos/ellos
nuestros humanos cuerpos de nosotros
hermosos y limpios
corretean bajo el sol de la luz/brillante/ardiente
como niños alegres.

Todo es de todos lo que es,
ni fronteras, ni provincias, ni rey,
dueño y señor de mi
soy/señor mío
y de mis tierras muchas/todas
mis ríos al amanecer
mis ricas/riquezas/hijos de mi,
mis frutas y frutos,
verdes y amarillas
acá, al sur del Sur.

Tiempo tomo para nombrar las cosas/acompasado,
con las personas pego la hebra/en pausa,
llamo al cielo: mar de arriba
mi amigo es: mi otro corazón/mío
al alma: el sol del pecho,
el abuelo se apoya en el: nieto continuo,
para caminar/él,
y cuando perdono digo: olvido
y perdono.

Existo de antes,
de más que todavía de antes
de antes que me descubrieran/invadieran/me
¡20.000 ANTES AÑOS!
piso y repiso ésta de América tierra.

Siglos y siglos que de mis hermanos/míos que fueron/
acabaron con la tragedia blanca/bruta de allá
del mar/ de la otra margen/ de codicia vinieron
a fuego y cruz/ a cruz y fuego rugiendo.

Quedaron de su propiedad,
el agua/el aire/el oro/la tierra/la vida/
el tiempo de elegir/libres de nosotros

los dioses buenos/ la nuestra poesía/de nosotros. 

Enrique Minetti



2 comentarios:

  1. ¡Excelente y muy justo! No somos solamente un recuerdo que se esfuma hasta desaparecer. Somos cimientos, somos fuertes pilares que sostienen la sociedad, porque sembramos, y esa siembra fue buena.

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  2. Gracias Negrita por tu siempre valioso comentario

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