Me
niego a ser olvido
Quiero
volver en el tiempo:
volver
a ser la niña de ayer
Volver
a pisar la mañana descalza.
De
un pueblo que fue bueno, triste
De
un arado que fue creación
Volver
a mi primer amor
Volver
a ese primer beso
Con
labios de otoño, sentir
Con
párpados cerrados amar
Y
en un suspiro pienso:
La
voluntad de Dios anhelante
La
marcha funeral prometida
-Lázaro
amado de los muertos-
¡Ay
de mí hombre, si yo pudiera
volver
a la mesa de mis Padres!
Quiero
volver en el tiempo:
A
la inmediatez de los años vencidos
A
los sueños del zaguán de ilusiones
A
esa vieja canción de enamorados
A
esa noche prometida en mis brazos, en mi abdomen
A
mis primeras lágrimas, a mi mejor sonrisa, a mi cuello de éter
A
los dulces instantes, a la vieja estación, a mis quince años de alcoba
A
tus primeras caricias, a tu primer poesía, a tu cuerpo bohemio de luz
Quiero
volver en el tiempo, a tu lado.
Marylin Thel (alumna del Taller literario para adultos mayores de la biblioteca Argentina "Juan Álvarez").
Me Recuerda a San Agustín:
ResponderEliminar¿Qué es pues el tiempo?
Si nadie me lo pregunta lo sé, si quiere explicarlo a quien me lo pide no lo sé (...)
Impecable Marylin, esa repetición que genera la musicalidad del verso.
Máximo Franklin 🌹
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
ResponderEliminarEl poeta no escapa a la razón ni al análisis... Pero respira el aire de lo visceral(...) María Susana, bajo el seudónimo de Marylin lo hace posible.
ResponderEliminarAsí lo entendió Bacon: "Si aprender es recordar, ignorar es el hecho de haber olvidado" (...)
Máximo Franklin 🌹