Abro la ventana como ayer
como antes de ayer.
Insisto en el rito añoso
de vencer la oscuridad.
El sol gris/adormecido
inunda perezoso el paisaje,
bostezan conmigo las sombras,
mientras gira la cuchara de café
en la taza tibia de café/llevándome la mano.
El reloj de péndulo
maquina su campanada inaugural
mientras estira el tiempo en la precariedad de su sombra.
Y desde la pared
quieta, intrigante,
una mirada antigua
me interpela.
Desde las rodillas de mi padre
mira inocente
¿el mañana?
Instante efímero
detenido en papel coloreado
que fue una vez, una mañana real
de un día cierto y verdadero
¿ese niño en sepia
es el hombre que hoy abrió la ventana?
Enrique
Minetti
Nos pega la dimensión deltiempo más fuerte, pareciera en esta mierda de cuarentena, Flaco.Muy bueno.
ResponderEliminarEs un tiempo de pensarnos...intimista..reflexivo..cuanta gracia nos da este tiempo....
ResponderEliminarEste es el momento..quizás mañana no haya tiempo...Graciassss
Si. Es el hombre reflexivo que hoy abrió la ventana. Hermoso!!!!
ResponderEliminarPreguntas...
ResponderEliminarMuy bueno!
ResponderEliminarMuchas gracias!